Couch London

Sé que siempre se dice que la culpa es del violador, pero ¿qué haces cuando distintas personas en distintos paises te violan de distintas formas? ¿Cómo voy a sentir pena de mí misma cuando me he metido yo sola en la boca del lobo tantas veces por culpa de mi inconsciencia?

He puesto que la violación fue en 2012, pero realmente esa solo ha sido la última de ellas.

La primera vez que me violaron fue hace ya más de 6 años. Yo estaba liada con un chico que trabajaba de camarero, y estaba muy pillada por él. Una noche había venido un amigo suyo y mi lío trabajaba de camarero, así que se tiró toda la noche invitándonos a copas a ambos con otra de las camareras. Cuando cerraron el bar, y el chico me dijo que fuera a su casa, yo con mi estado de alcohol no me di cuenta de que la intención de mi lío era tirarse a la camarera, y que yo me quedará en el salón con su amigo.

Cuando llegué a la casa y vi el percal, pensando que la cosa no pasaría de allí y bastante lejos de mi casa me quedé dormida en el sofa, hasta ahí no hubo problema, el amigo se me acercó, pasé de él y no pasó nada más, pero al rato llego el compañero de piso, al que le hizo mucha gracia ver a una chica en mi estado en el sofa.

No sé si antes de que empezará a meterme mano o después intente irme, pero cerró la puerta con llave y las escondió. Me desvistieron 3 o 4 veces, y yo me vestí otras tantas, y solo repetía que me quería ir a mi casa.

En la habitación de al lado había una chica, con el chico con el que yo me liaba, pero yo era incapaz de gritar, el miedo y la verguenza me paralizaban. No entendía muy bien lo que ocurría y no era capaza de hacer nada con mi cuerpo, me veía, como transportada desde fuera y me gritaba a mí misma una y otra vez, pero yo no respondía.

Al cabo de un rato, yo seguía siendo un maniquí. Mi lío salió de la habitación y sus amigos me pusieron a hacerle una paja y el chaval se metió al baño al rato con desprecio. Siguieron todabía un rato, y yo solo decía que me quería ir, cuando por fin me dejaron hacerlo, les di las gracias, los buenos días, y hasta luego.

Me dí una ducha de 4 horas en mi casa, no me quedó más remedio que contarles lo ocurrido a los tíos con los que vivía, aunque no les conté toda la historia por miedo a que mi tío les hiciera algo y acabara en la cárcel por mi culpa. Así que dijé que ni los conocía ni había manera de encontrarlos.

No se lo conté a nadie más hasta un poco más adelante, a mi hermana y un chico que me ayudó bastante a superarlo. O eso creía yo. Al tiempo, al no haberlo tratado (bastante tiempo después, casi un año) las pesadillas aumentaron. Me dije a mí misma que no era nada, que el sexo no era nada, y me dediqué a tener mucho sexo, a veces no me sentía mal… He tenido ataques de ansiedad, taquicardias, brotes psicóticos…

Hay dos cosas de las que me arrepentí despues de esto, de no haber denunciado a esos hijos de puta, y de no haber pedido ayuda cuando era el momento. Solo espero que esa fuese la única vez que hicieran algo así, y que ninguna chica sufriera lo que yo sufrí por no pararlo cuando tuve oportunidad. Y espero tener algún día el valor para enfrentarme a todos mis demonios y que no sea tarde para ello.

Tras mucho tiempo y muchas historias buenas y malas, y unos cuantos malos rollos derivados del estrés postraumático me conseguí recuperar, o eso creía yo. Dos sucesos más terminarón de destruir mi fragil mente.

Un día salí con uno de mis mejores amigos de fiesta, bebimos y fumamos bastante y nos fuimos a una discoteca, allí se fue un rato y me dejó con sus amigos. Lo siguiente que recuerdo es estar en la comisaría con un ataque de ansiedad, y sin una camiseta que tenía que estar debajo del vestido. Entre medias recuerdo tirones y empujones en el baño, y me hicieron una prueba y parecía que no me pasó nada. Mi amigo no me volvió a hablar por acusar a sus amigos de hacerme algo. Yo nunca he sabido si ese día pasó algo, fue un brote psicótico o mitad y mitad. Además nunca recuperé mi camiseta.

Tras estó estuve un tiempo bastante asustada, deje de beber, de fumar, mejoré y me fui a Londres. Allí, pese a las advertencias de mi padre de no hacer couhsurfing (que son páginas web donde chicos, chicas y familias ofrecen su sofa para dormir un par de días y visitar la ciudad), yo lo hice, y cómo no, por si eso no fuese suficiente, y pese a mi historial decidí ir a casa de un chico (que pensaba que era gay por que tenía un nombre gracioso, y fotos muy vintage y tenía buenas referencias). Cuando llegamos a su casa, que compartía con una señora y su hijo despues de cenar con ellos subimos al cuarto donde ibamos a dormir (allí no había sofá, así que se suponía que yo dormía en la cama y él en el suelo, todo un caballero), allí bebimos y fumamos dos porros que me habían regalado en el hostal. Él se acercaba a mi continuamente, y yo lo alejaba, terminé sentándome en la cama, el se volvió acercar, puse mis piernas como barrera y lo empujé, pensé que se lo había dejado bastante claro. La cama se había separado de la pared, y el somier era blandito, así que me metí en el hueco y me quede dormida enseguida entre el alcohol y los porros. Cuando me desperté tenía su pene en la zona entre mi culo y mi trasero, no sabría decir bien donde. Me puse a gritar, me subí la ropa y me fuí corriendo. Fue una situación al estilo de Billy Wilder, él me seguía más asustado que yo, corriendo por las escaleras, me decía que lo sentía que no me fuera, que se quedaba en el suelo, y yo mientras cogía mis maletas como podía a todo correr le decía: «¿Cómo me voy a quedar aquí si me estabas violando? ¿Tú entiendes lo que es eso?» No es que fuera gracioso, pero a veces las situacines dramáticas tienen cierta comicidad…

Salí corriendo y estaba bastante lejos de Londres, era de noche y no había gente por la calle, finalmente encontré a una señora que llamó a la policía, yo no me había alejado y podía decir a la policía dónde era. Arrestaron al chico, me hicieron las pruebas y dieron positivo. Al menos no me contagió ninguna cosa rara.

Han pasado unos meses, pero dentro de poco tengo el juicio. Tengo pesadillas a menudo, aunque mantengo una vida bastante normal, no me gusta estar quieta demasiado porque no quiero pensar, cada película, cada frase, casi cada momento, me recuerda esta historia, todas ellas en algún momento. Lucho cada día contra ellas, y no he sido capaz de contárselo a mi familia por miedo a que piensen como yo que soy tonta.

Me cuesta tener apetencia sexual, cuando antes me encantaba, me da miedo tener relaciones por si vienen todas las imágenes a mí como me ha pasado otras veces. Cuanto más se acerca el día, más imágenes vienen a mi cabeza y las vuelvo a revivir como si fuese una tortura. Lo peor es que en ocasiones me pregunto: ¿Estaré haciendo lo correcto? ¿No habrá sido mi culpa? Se merece pagar tan caro su error cuando también fue el mío. Pero entonces pienso que yo ya estoy pagando el mío, y recuerdo lo que me pasó la otra vez, y no quiero mirar atrás dentro de 5 años y arrepentirme de no haberlo denunciado, porque se lo ha podido hacer a alguien más.

Publicado el 25/04/2013